Si buscamos una definición sencilla del concepto castigo encontramos que es: La práctica de imponer algo desagradable a una persona que ha hecho algo inconveniente; sin embargo, el término desagradable puede traer múltiples prácticas que maltratan tanto física como psicológicamente al niño; puede ser entonces desagradable un grito, una ridiculización, un golpe, un mordisco, etc.
La labor de control que muestra el castigo en la que se aplica causando dolor al culpable (infractor) en intensidades diferentes, consideran el volumen y la intensidad suficiente, para evitar la reincidencia en el individuo. “El castigo por esta vía, como instrumento de gobierno, posibilita prevenir infracciones en el individuo y en la población” (Ossa, 2010), borrando el anhelo (produciendo temor) para la realización de una falta, definida según las leyes, normas o imposiciones. La aplicación del castigo, permite contrarrestar excesos, reducir debilidades y amenazas.
Por su parte, el premio (del latín praemium) es cualquier artículo o compensación de otro tipo, como regalos o dinero, que se recibe por agradecimiento o reconocimiento al esfuerzo realizado. Entonces si el niño hace lo que debe hacer recibe una recompensa, y ¿Cuándo no la reciba que sucederá?
El castigo y el premio como las dos caras de la moneda se trasladan a diversos escenarios por su efectividad. “Las mencionadas prácticas son defendidas por el “beneficio” que ellas generan para modificar las conductas que ofenden o se demandan. (Ossa, 2010)
Pésimo sistema es también el de presentarles la ley del deber como dependiente de la sanción de las penas y de las recompensas, porque así se adultera y desnaturalizan las nociones del bien y del mal. Jamás se le debe hacer creer a un niño que una cosa es mala porque se castiga, o buena porque se recompensa, no: es preciso arraigar en su alma la convicción profunda de que las acciones […] se castigan porque el mal es acreedor a la pena; así como de que se recompensan las buenas porque el bien merece el premio. No […] altera más la moralidad y el carácter en su principio que el atribuir al cumplimiento de los deberes una intención venal y mercenaria. (Galvez, 1971, 311)
Bibliografía: GÁLVEZ, José de Jesús. El deber. En: La Escuela Normal. Bogotá. T. V No 143 (Sep. 27 1873). ARPE C 141 1971 RI. p. 311.
OSSA, Arley Fabio. Propuesta de Práctica Investigativa para el Programa de Pedagogía Infantil. Modos de Existencia del Castigo Y el Premio en la Educación de la Infancia en Colombia de 1925 a 1946. Medellín – Colombia. 2010
Como educadoras y educadores infantiles, es una temática que se debe ahondar, pues tanto en la familia como en la escuela repercuten las consecuencias del premio y el castigo, aunque estos no son malos en sí, sino en la forma que se utilizan, pues en muchos casos es sólo para suplir la falta de autoridad por parte de los padres y maestros, pero también pueden ser un instrumento educativo. Es indiscutible que hay que poner límites claros al comportamiento de los niños y niñas, y modificar o reforzar una conducta. Pero ante todo, también debemos recordar que durante la infancia los niños y niñas actúan imitando el comportamiento que ven de sus padres y familiares o en la televisión.
ResponderEliminarEs una tematica ahistorica, no podemos decir que tiene un comienzo, pero lastimosamente tampoco podemos decir que tiene un fin, ya que mùltiples actos en la interaccion con los niños y las niñas, hacen que se haga desde una postura despota, claro que no siempre, por eso abordar este tema siempre es pertinente, y la manera como ustedes lo presentan en el blog, es muy completa, clara y sensibilizadora. Excelente.
ResponderEliminarEs una temática muy interesante que como maestras debemos conocer, ya que a diario se ve en cada institución, no solo en las instituciones educativas, sino también en los hogares y en los diferentes espacios, que los niños/as transgreden la norma y que en muchas ocasiones los adultos no saben manejar algunas situaciones y por el contrario terminan por aceptar comportamientos de los niños/as que están por fuera de la ley.
ResponderEliminarSería muy interesante aplicar este proyecto y analizar los efectos que puede producir en cierta población.
Felicitaciones por el blog.
Margarita Franco V.
En realidad es una tematica muy intersante la planteada por este proyecto... sancionar o premiar son dos terminos importantes y muy relevantes en la formacion de una persona y mas desde la infancia, es fundamental enseñar desde pequeños a los niñas y las niñas como las cosas positivas como las negativas tienen sus repercuciones, consecuencias, buenas o no tanto, y que todo tiene su valor e importancia, que es como un estimulo respuesta...
ResponderEliminarPero de igual forma este es tambien un espacio de reflexion para los adultos involucrados en la educacion de los pequeños en el que se nos invita a reflexionar sobre nuestra manera de actuar frente a dos diversas situaciones que deben ser aplicadas acertadamente para evitar con ello cometer errores o huellas imborrables en la formacion y la personalidad de estas pequeñas personitas y su mundo.
Muy buen trabajo.
considero que la tematica es muy pertinente , ya que invita a reflexionar sobre las diferentes maneras de como la intervencion pedagogica puede inferir en los procesos educativos que ejercemos sobre el niños. se nota un buen compromiso para evidenciar como abordar el tema y como es visto desde diferentes referentes felicitaciones
ResponderEliminarEste tema es muy interesante, puesto que conlleva a meditar y reflexionar sobre como se lleva a cabo el premio y el castigo; en nuestro caso, a nivel pedagógico. Ambos pueden ser utilizados pero sin caer en la exageración de que el niño o la niña crea que siempre que haga algo bueno tendrá una recompensa y que si hace lo contrario obtendrá un castigo; todo esto posibilita tener claro que hay que cimentar bases sólidas en la educación, y asumir la autoridad como necesaria en los procesos enseñanza - aprendizaje, porque en esa medida los pequeños interiorizarán que hay normas y consecuencias de todo lo que se hace en la vida, y que además conducen a regular los procesos y a tener una mayor conciencia de los actos.
ResponderEliminarMuy bueno el blog...felicitaciones
Lina Marcela Quiroz Hoyos
Es un tema bastante pertinente, para los-las docentes en formación, nos aportan muchos elementos que enriquecen nuestra formación. Es muy importante que como padre, madres. Maestros y maestras nuestra autoridad este fortalecida y no recurramos a estos métodos pues acostumbran al niño-niña a hacer todo a cambio de algo y no por que considere que es su deber, es necesario que el niño-niña entienda que como ser humano tiene unos derechos y también unos deberes que debe cumplir y que por esto no merece un premio, pues es su deber.
ResponderEliminarEl blog es muy completo lo cual le permite cumplir su cometido.
Carlota García
en la pedagogía tradicional el sistema de premio y castigo es la herramienta de reconocimiento y etiquetamiento mas usada con los estudiantes; siendo este sistema subjetivo y excluyente pues los estudiantes hacen las cosas solo por el premio y no por su propia iniciativa por miedo a la no aceptacion
ResponderEliminarel blog es pertinente, ya que, como maestras en formacion es necesario reconocer que en ocasiones usamos estas dos como una estrategia con la cual creemos educar.
ResponderEliminarsin embargo es necesario tener encuenta que castigamos en ocasiones al sujeto que a su accion por la cual se hizo a creedor de dicho castigo y es mas facil castigar que premiar. pero que seria necesario para premiar? creo que es una pregunta que todos en un momento determinado deberiamos hacernos sin olvidar que somos educadores y todo premio o castigo debe llegar a este a educar al suejto.
Es un tema que a veces se torna confuso debido a la concepción que se tenga de premio y de castigo, y de la concepción que se tenga de niño... pues un premio que equivale a chantaje, en tanto le dice a un niño que debe hacer algo para ganarse lo que desee, cosa que es bien diferente a un estímulo positivo, que habla más en términos de reconocimiento por la tarea lograda, acción que estimula al niño, no por ganar algo material, sino por la propia satisfacción del logro, cuando ve que el otro se alegra y lo felicta por eso..
ResponderEliminarel castigo es un tema sobre el cual se debe reflexionar, sobre todo teniendo muy en cuenta conjugar el acto con la palabra, ser consecuente, pero sobre todo invitar al niño a reflexionar, a que asuma su responsabilidad en el asunto, para que el mismo se cuestione y transforme su modo de actuar.
comentario anterior: Juliana Gómez P.
ResponderEliminarEl blog en primera instancia, me parece que esta muy bien organizado y es muy agradable para la lectura en tanto la distribución de la información la hacen de manera sobria y esquemática.
ResponderEliminarEl tema que trabajan lo hacen de manera bien documentada y la propuesta de intervención que plantean realizar en el municipio de San Vicente considero es pertinente y, además, bien diseñada para llegar a el objeto de intervención planteado.
Con respecto a la temática que trabaja el blog, el premio y el castigo, quiero plantear que este me parece que no es la mejor forma de educar a un sujeto, ya que condiciona a que toda acción realizada por el niño tenga un estimulo, ya sea positivo o negativo, y esta situación a largo plazo se puede salir de las manos, tanto de los padres como de los docentes; en tanto el niño cada día demandara nuevos y mas estímulos conductista. Propongo mas bien construir una educación basada en el dialogo y en le reciprocidad, dentro de la cual el sujeto se pueda hacer consiente de sus acciones.
La felicito por el buen trabajo realizado.
Juliana Correa Franco.
Muy intereseante este blog, no solo por la pertiennecia para nosotros como maestros en formación, sino para todos los padres de familia que desde su desconocimiento y con la convicción de que estan educando de la mejor manera a sus hijos, deben enterarse de las implicaciones que cada uno de estos métodos trae en los niños no solo en la infancia sino para toda su vida.
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ResponderEliminarEl premio y el castigo son temas que siempre despiertan interés por lo que ellas representan en el marco de las pautas y prácticas de crianza. Ambas se han utilizado en términos conductistas y su implementación se ha asociado con la obtención de estímulos por la realización de una acción específica y con las sanciones que pueden derivarse de faltas o errores cometidos.
ResponderEliminarPremiar y castigar se constituyen como formas de hacer sentir la autoridad frente a los hijos e hijas, pero lo ideal sería llegar a ser un referente de palabra y acción lo suficientemente asertivo como para no tener que valerse de este tipo de métodos, pues la autoridad implica una posición ética del sujeto en la que su ejemplo lo ubica como merecedor de respeto.
Corregir y disciplinar a los hijos no es una tarea fácil, pero es una responsabilidad que asumimos desde el momento en tomamos la decisión de engendrar una nueva vida, un ser que ha de incorporar la norma como parte de sí, para aprender a convivir.